BOSQUEJO
Tema: Adoración. Título: Tiatira – la iglesia que fornica. Texto: Apocalipsis 2: 18 – 29. Autor: Pastor Edwin Guillermo Núñez Ruiz.
Introducción:
A. Lema. Tenemos la iglesia que perdía su amor por Dios (Efeso), la iglesia sin tacha (Esmirna), la iglesia sin discernimiento (Pergamo), hoy veremos a una iglesia que fornicaba instigados por una mujer.
B. La estructura de este mensaje será así:
(Dos minutos de lectura)
I. DESCRIPCION (Ver 18).
A. Se enfatizan tres características de la visión del cap. 1:
1. El hijo de Dios: Titulo divino
2. Ojos como llama de fuego: La penetrante mirada del Jesús que todo lo conoce
3. Pies como bronce bruñido: el Juicio divino que pisotea a sus enemigos
II. ELOGIO (Ver 19).
A. Los elogios a esta comunidad son por:
1. Amor.
2. Fe.
3. Servicio.
4. Paciencia.
Pero sobre todo esta iglesia contrario a lo que hacia la iglesia de Éfeso no estaba decreciendo estaba creciendo.
B. Que buena noticia es una persona, una iglesia que crece.
III. REPRENSION (Ver 20 – 21).
A. La reprensión para esta iglesia al igual que la iglesia de Pergamo tiene que ver con la falsa doctrina, ya no es la doctrina de Balaam y los Nicolaitas sino la doctrina de Jezabel.
Esta es una mujer que se ha autoproclamado profetisa, mas “por sus frutos los conoceréis”. Existen maneras de conocer si una persona en verdad tiene el don de la profecía. Por ejemplo, podemos preguntarnos: ¿cuándo se refiere a eventos futuros estos se cumplen? ¿Cuándo se refiere a descubrir lo oculto es real? ¿Esta su mensaje acorde a la Escritura? ¿Su mensaje fomenta la santidad?
En el caso de esta mujer su mensaje no fomentaba la santidad sino el libertinaje y el pecado. Específicamente estaba enseñando y seduciendo a otros cristianos a la fornicación y a participar de la idolatría. Lo que tal vez sucedía es que en Tiatira existían muchas agremiaciones, habían grupos de textileros, metaleros, artesanos, pertenecer a uno de ellos exigía participar de la idolatría (pues cada gremio tenía su “patrono”) que a su vez involucraba orgias. A su vez no pertenecer condenaba al individuo a ser excluido de la vida comercial en ese gremio y caer en la pobreza. Seguramente Jezabel predicaba un mensaje de acomodamiento a las circunstancias para no caer en la pobreza. Es decir, “podemos participar de los gremios, podemos asistir a los convites que estos promueven, aun podemos participar en las orgias propias de cada grupos, pues no podemos caer en la pobreza, tenemos familias que mantener etc”, esto o algo muy parecido constituía su predicamento. De esta manera, muchos estaban siendo desviados de la correcta ortodoxia hacia la falsedad y la mentira.
IV. ADVERTENCIA (Ver 22 – 23).
A. La advertencia se relaciona con la descripción, el Señor son sus ojos de fuego es quien escudriña la mente y el corazón, el Señor con sus pies de bronce es quien pisotea en juicio a sus enemigos, en este caso a Jezabel quien será arrojada en cama (enfermedad), pues aunque él se le ha tenido paciencia no quiere arrepentirse.
Por otro lado, a quienes le siguen se les advierte que: vendrá una gran tribulación sobre ellos, además serán heridos de muerte todo esto sucederá sino se arrepienten.
B. Note el desagrado, el disgusto del Señor sobre aquellos que hacen errar el camino de los demás con su predicamento mentiroso, note el juicio para quienes desvían a los demás de la santidad y la sana doctrina.
V. PROMESA (Ver 24 – 29).
A. Esta última sección la podemos dividir en dos partes:
1. No todos en Tiatira habían caído en esto, no habían conocido “las profundidades de Satanás” (frase despectiva contra la supuesta mayor revelación de los falsos) a estos no se les exige nada más sino que sigan como vienen hasta la venida del Señor.
2. Luego, relacionado a esto vienen las promesas al vencedor. ¿Quiénes son los vencedores en este caso? aquellos que siguen creciendo aquellos que no se dejan engañar de la falsa doctrina a ellos se les promete:
a) Reinar y juzgar con Cristo.
b) A Cristo mismo (la estrella resplandeciente de la mañana).
Conclusiones:
Tiatira representa una advertencia sobre cómo el crecimiento espiritual puede ser socavado por la influencia de enseñanzas falsas. A pesar de sus virtudes, la iglesia se dejaba seducir por la comodidad del pecado, priorizando la aceptación social sobre la santidad. La advertencia del juicio divino resalta la importancia de discernir y mantenerse firme en la fe. Los que resisten estas tentaciones reciben promesas de recompensa y comunión con Cristo. Este mensaje nos llama a evaluar nuestras propias creencias y prácticas, buscando siempre la verdad y la santidad en nuestra adoración.
VERSIÓN LARGA
Tiatira – la iglesia que fornica
Apocalipsis 2: 18 – 29
Introducción:
La iglesia de Tiatira es un ejemplo fascinante de cómo una comunidad puede enfrentar grandes desafíos en su vida espiritual, a pesar de mostrar un crecimiento notable en ciertos aspectos. A lo largo de las cartas a las iglesias en el libro de Apocalipsis, hemos visto diversas características y circunstancias que afectan a las comunidades de fe. Desde la iglesia que perdió su primer amor en Éfeso, la iglesia sin mancha en Esmirna, hasta la iglesia que carecía de discernimiento en Pergamo. Hoy, nos encontramos ante una iglesia que, a pesar de sus virtudes, se entrega a prácticas de fornicación y pecado, influenciada por una mujer que se proclamaba profetisa.
La estructura de este mensaje se desarrollará en varias secciones que nos permitirán entender mejor la condición de esta iglesia y la advertencia que el Señor tenía para ella. Comenzaremos por describir la visión que el Señor tiene de la iglesia, continuaremos con los elogios que les brinda, la reprensión que reciben por sus prácticas, la advertencia del juicio y finalmente, las promesas que se hacen a aquellos que perseveran en la fe.
I. DESCRIPCIÓN (Ver 18)
La carta a Tiatira comienza con una descripción del Cristo resucitado. En el versículo 18, se nos presentan tres características esenciales de esta visión. En primer lugar, se refiere a Cristo como el "Hijo de Dios", un título que no solo revela su divinidad, sino que también establece su autoridad sobre la iglesia. El término "Hijo de Dios" implica una relación única con el Padre y un lugar de supremacía en el ámbito espiritual. Este título es crucial, ya que establece la base sobre la cual se fundamentan las advertencias y exhortaciones que se darán a la iglesia.
En segundo lugar, se menciona que tiene "ojos como llama de fuego". Esta imagen sugiere una capacidad sobrenatural para ver y conocer todo. Los ojos de fuego simbolizan la pureza, la verdad y la justicia de Cristo. Él no solo ve las acciones externas de las personas, sino que también penetra en sus corazones y mentes, discerniendo las intenciones más ocultas. Este aspecto de la visión de Cristo es particularmente relevante en el contexto de la comunidad de Tiatira, que se estaba desviando de la verdad.
Finalmente, se hace referencia a sus "pies como bronce bruñido". Esta imagen simboliza el juicio divino y la autoridad de Cristo para aplastar a sus enemigos. En la antigüedad, el bronce bruñido era un material fuerte y resistente, y su uso en esta descripción sugiere que el juicio de Cristo será contundente y efectivo. En resumen, la descripción de Cristo presentada en este versículo establece un contexto de autoridad, discernimiento y juicio, que será fundamental para comprender el mensaje que se dirige a la iglesia de Tiatira.
II. ELOGIO (Ver 19)
A pesar de las dificultades que enfrenta esta comunidad, el Señor comienza su mensaje con elogios. Reconoce el amor que tienen unos por otros, su fe, su servicio y su paciencia. Es importante destacar que estos elogios son significativos, ya que demuestran que, a pesar de las influencias negativas que estaban experimentando, la iglesia tenía aspectos positivos que el Señor valoraba. En contraste con la iglesia de Éfeso, que había perdido su primer amor, Tiatira se destaca por su crecimiento.
El amor, la fe, el servicio y la paciencia son virtudes que deben caracterizar a toda comunidad de fe. El amor es fundamental en la vida cristiana; sin él, nuestras acciones carecen de valor. La fe es la base de nuestra relación con Dios, y el servicio es una expresión tangible de nuestro amor y fe en acción. La paciencia es esencial en el camino cristiano, ya que nos permite perseverar en medio de las dificultades y pruebas. La iglesia de Tiatira estaba avanzando en estos aspectos, lo que es un reflejo de la obra del Espíritu Santo en medio de ellos.
El crecimiento de la iglesia se puede observar en su capacidad para enfrentar el entorno hostil que les rodeaba. Tiatira era una ciudad conocida por su industria textil y metalúrgica, lo que la hacía un centro comercial importante. La presión económica y social que enfrentaban los miembros de la iglesia era considerable, ya que, para pertenecer a los gremios, debían participar en rituales paganos y festividades que incluían prácticas inmorales. Sin embargo, a pesar de estas presiones, la iglesia continuaba creciendo y desarrollándose, lo que es un signo de la fidelidad de sus miembros y de la obra del Espíritu Santo en sus vidas.
La noticia de que una iglesia está creciendo siempre es alentadora, pues refleja el deseo de sus miembros de servir a Dios en unidad y amor. Sin embargo, no debemos perder de vista que el crecimiento espiritual no siempre es fácil y que, a veces, puede venir acompañado de desafíos significativos. La iglesia de Tiatira, a pesar de su crecimiento, enfrentaba una situación crítica que necesitaba atención inmediata.
III. REPRENSIÓN (Ver 20 – 21)
Sin embargo, a pesar de sus virtudes, la iglesia de Tiatira enfrenta una grave reprensión. Al igual que la iglesia de Pergamo, su problema principal radica en la aceptación de falsas doctrinas. En este caso, se menciona a una mujer llamada Jezabel, que se autoproclama profetisa. Su enseñanza no solo es errónea, sino que también promueve el libertinaje y la fornicación, alejando a los creyentes de la santidad que Dios demanda.
Es importante entender quién era Jezabel en el contexto bíblico. En el Antiguo Testamento, Jezabel fue la esposa del rey Acab y es conocida por haber introducido la adoración a Baal en Israel, llevando a muchas personas lejos de la verdadera fe. La mención de Jezabel en este contexto no solo señala a una figura específica, sino que evoca la imagen de alguien que lleva a otros a la apostasía. En Tiatira, esta mujer estaba seduciendo a los creyentes a participar en prácticas inmorales y en la idolatría, lo que era inaceptable para el Señor.
El mensaje de Jezabel era uno de acomodamiento a las circunstancias. Dado que en Tiatira existían múltiples gremios que requerían la participación en ritos idólatras y orgías, Jezabel predicaba que era aceptable participar en estos actos para no caer en la pobreza o en la exclusión social. Este tipo de justificación es común en nuestras vidas hoy en día; a menudo nos encontramos en situaciones donde las presiones externas nos llevan a comprometer nuestros principios y valores. Sin embargo, el llamado de Dios es a mantenernos firmes en la verdad y en la santidad.
Además, es fundamental hacer un análisis de la forma en que las enseñanzas de Jezabel afectaban la vida de la iglesia. Muchos creyentes se sentían atrapados entre su fe y las exigencias del mundo. La presión social y económica puede llevar a la Iglesia a comprometerse con el mundo. La necesidad de pertenecer, de no ser excluidos del comercio y de mantener a nuestras familias puede ser una tentación muy fuerte. La advertencia a Tiatira debe resonar en nosotros, recordándonos que nunca debemos sacrificar nuestra fe y nuestra integridad espiritual por la aceptación o la comodidad material.
El hecho de que Jezabel se autodenominara profetisa es un recordatorio de que no todas las voces que escuchamos son verdaderamente de Dios. La verdadera profecía siempre estará alineada con la Escritura y buscará fomentar la santidad. Sin embargo, el mensaje de Jezabel era uno de acomodamiento a las circunstancias, instando a los creyentes a participar en las prácticas idólatras y en la inmoralidad sexual que prevalecía en la sociedad de Tiatira.
IV. ADVERTENCIA (Ver 22 – 23)
La advertencia que el Señor hace a la iglesia es severa. Aquel que tiene ojos como llama de fuego está observando, y su juicio es inminente. Jezabel y aquellos que la siguen serán juzgados. La advertencia de que la gran tribulación vendrá sobre ellos y que serán heridos de muerte es un llamado urgente al arrepentimiento. No es un mensaje de condenación sin fundamento, sino de amor, buscando que el pueblo regrese al camino correcto.
Es importante notar que el desagrado del Señor no solo se dirige a Jezabel sino también a todos aquellos que han permitido que sus corazones se desvíen de la verdad. Aquellos que causan tropiezo a otros son objeto del juicio divino. La santidad no es una opción, sino un mandato. La advertencia nos recuerda que el camino de la verdad a menudo es difícil, pero el costo de la comodidad temporal es mucho más alto.
La advertencia también incluye una promesa de juicio para aquellos que han sido seducidos por las enseñanzas de Jezabel. El Señor tiene paciencia, pero su paciencia no es eternamente prolongada. La exhortación a arrepentirse es un acto de amor divino, un llamado a regresar a la fe genuina y a la práctica de la santidad. La advertencia es clara: el juicio será severo para aquellos que desvían el camino de los demás con sus enseñanzas engañosas.
El llamado al arrepentimiento es una invitación a reflexionar sobre nuestras propias vidas y prácticas. A menudo, las influencias externas pueden llevarnos a desviarnos del camino de la verdad. La advertencia que se da a la iglesia de Tiatira es un recordatorio de que debemos permanecer firmes en nuestras convicciones y estar dispuestos a rechazar cualquier enseñanza que no esté en línea con la Palabra de Dios.
V. PROMESA (Ver 24 – 29)
La sección final de este mensaje se centra en las promesas que el Señor hace a los que vencen. No todos en Tiatira habían caído en la trampa de Jezabel. Aquellos que no han conocido "las profundidades de Satanás" recibirán la exhortación de continuar firmes en su fe. Esto es un aliento para los que se mantienen leales a la verdad en medio de la confusión.
Las promesas a los vencedores son gloriosas. Primero, se les promete reinar y juzgar con Cristo. Esta es una imagen de la victoria final y la recompensa que aguarda a aquellos que perseveran en la fe. En segundo lugar, se les promete a Cristo mismo, quien es descrito como la "estrella resplandeciente de la mañana". Esta imagen nos recuerda que la verdadera comunión con Él es la mayor recompensa que podemos recibir.
Es importante notar que el término "estrella resplandeciente de la mañana" tiene un significado profundo. En la antigüedad, la estrella de la mañana era vista como un símbolo de esperanza y nuevo comienzo. Para los creyentes que perseveran en su fe, esta promesa es un recordatorio de que, a pesar de las dificultades y tentaciones, hay una luz que brilla al final del camino. Aquellos que se mantienen fieles a la verdad, a pesar de las presiones y tentaciones, recibirán la recompensa de la vida eterna y la cercanía con Cristo.
Las promesas del Señor no son solo para este tiempo, sino que trascienden a la eternidad. Aquellos que resisten las tentaciones del mundo y permanecen firmes en su fe experimentarán la gloria de reinar con Cristo. Esta es la esperanza que nos impulsa a seguir adelante, a pesar de las adversidades que podamos enfrentar en el camino.
Conclusiones:
La iglesia de Tiatira nos presenta un poderoso recordatorio de cómo el crecimiento espiritual puede ser socavado por la influencia de enseñanzas falsas. A pesar de las virtudes que poseían, se dejaron seducir por la comodidad del pecado, priorizando la aceptación social sobre la santidad. El juicio divino que se avecina es un llamado a la reflexión y al arrepentimiento.
Este mensaje nos desafía a evaluar nuestras propias creencias y prácticas, recordándonos que debemos buscar siempre la verdad y la santidad en nuestra adoración. La promesa de comunión con Cristo es un aliciente para aquellos que resisten las tentaciones del mundo y permanecen firmes en su fe. En un mundo lleno de compromisos y desviaciones, que podamos ser como los vencedores de Tiatira, manteniendo nuestra integridad y fidelidad a la Palabra de Dios.
Recordemos que la adoración no es solo un acto ritual, sino un estilo de vida. La verdadera adoración se manifiesta en nuestra obediencia a la palabra de Dios y en nuestra disposición a vivir en santidad. La iglesia de Tiatira nos llama a ser vigilantes, a discernir las enseñanzas que recibimos y a mantenernos firmes en la fe. Que el Señor nos ayude a ser iglesias que, aunque enfrentemos desafíos, siempre busquemos agradarle en todo y a vivir en su verdad.
Este mensaje no solo es relevante para la iglesia de Tiatira, sino que también resuena en nuestras vidas hoy. Puede que no enfrentemos exactamente las mismas circunstancias, pero las tentaciones y las influencias del mundo son reales. Seamos valientes y fieles, y recordemos que la recompensa de Cristo es eternamente valiosa.
Además, es esencial reconocer que la iglesia de Tiatira representa un llamado a la reflexión en nuestras propias vidas. ¿Estamos permitiendo que las influencias externas nos desvíen de la verdad? ¿Estamos siendo seducidos por enseñanzas que no están en línea con la Palabra de Dios? El llamado a la santidad y a la verdad es un desafío constante en nuestra vida cristiana, y debemos estar dispuestos a enfrentar esas preguntas con honestidad.
Al final del día, la iglesia de Tiatira nos recuerda que, a pesar de los desafíos, siempre hay una oportunidad para el arrepentimiento y la restauración. El amor de Dios es inagotable, y su deseo es que todos lleguen al arrepentimiento. Que podamos ser una iglesia que, al igual que los vencedores de Tiatira, se mantenga firme en la fe y busque la santidad en cada aspecto de nuestras vidas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario