Por: Pastor Edwin Guillermo Nuñez Ruiz
Dado que la resurrección de Jesús es el evento central del cristianismo y como pudimos constatar hace un mes para la gran mayoría de los historiadores este puede ser un evento altamente probable, es la mejor explicación a hechos como: la tumba vacía, las apariciones post-morten de Jesús y el origen de la creencia de los discípulos en la resurrección
Sin embargo, siempre existirán las personas que controviertan, una de las principales objeciones a los relatos de la resurrección es que los evangelios no son fiables, que ellos fueron escritos por personajes que no fueron testigos de los hechos y que fueron escritos cuatro, cinco y hasta mas décadas después de haberse sucedido los acontecimientos.
Por ello tratare de responder a dos preguntas en este articulo, la primera: ¿quienes fueron los escritores de los evangelios? Segunda: ¿en que fecha se escribieron los evangelios? Busco mostrarle al lector si acaso podemos confiar en los evangelios como testigos confiables de Jesucristo.
Comencemos por la autoria:
La tradición de la iglesia nos dice que los autores de los cuatro evangelios son aquellos que tenemos hoy en día como encabezados de nuestras Biblias.
Es plausible pensar que aunque tal vez ninguno de los evangelios tenía los respectivos títulos que hoy conocemos al ser escritos, estos pudieron haber sido denominados así no muy distante de su escritura original, ya que si no fuera así ¿de qué otra manera pudieran haber sido diferenciados? Estos no podían correr por allí de la manera lo hicieron como cartas anónimas, requerían de una etiqueta que los identificara y que mejor que el nombre del autor. Además, el acuerdo que existía en el siglo segundo acerca de los autores bien pudiera ser una prueba de que estos ya contaban con un título mucho antes, de no haber sido así muy posiblemente la discusión sobre su autoría hubiere sido más conflictiva pero no hay evidencia de que esto hubiera sido así.
MATEO
El evangelio se denomino originalmente “según mateo”, no "san mateo" caso que cuenta igual para el resto de los evangelios.
En cuanto a su autoría tenemos a Papias un antiguo historiador de la iglesia del siglo II (aprox. 125 d.C.), este hombre escribió cinco libros llamados “interpretación de los oráculos del Señor”, en estos daba cuanta de información recibida de discípulos del mismo Señor Jesucristo como Juan el anciano (probablemente el Apóstol Juan) y Ariston, Papias a su vez, es citado por Eusebio de Cesarea otro historiador posterior quien escribió: “Mateo colecciono los dichos de Jesús en lengua Hebrea”.
A su vez Ireneo de Lyon quien conoció a Policarpo un discípulo del apóstol Juan y de quien seguramente recibió buena información, dijo allá por el año 185 d.C aproximadamente: “Mateo también produjo un evangelio escrito entre los hebreos en su propio dialecto, mientras Pedro y Pablo ponían los fundamentos de la iglesia”.
Orígenes por su parte, citado también por el historiador eclesial Eusebio de Cesarea nos dice: “que primero fue escrito el según Mateo, quien había sido cobrador de impuestos pero que después fue apóstol de Jesucristo, y que predico en hebreo para creyentes Judíos…”, también: “Mateo predico al principio a los hebreos…escribió su evangelio en su propia lengua nativa”
Además es importante anotar como Orígenes nos dicen que el evangelio según Mateo fue el primero en escribirse, esto llama la atención porque según los estudiosos modernos el primer evangelio en ser escrito fue el de Marcos, tema del que nos referiremos mas adelante.
Jerónimo también nos hacen pensar que existió un evangelio de Mateo en Hebreo en realidad arameo, el cual testifica que conoció y que incluso tradujo, nos informa también Jerónimo que existió otro evangelio en griego que seria el que tenemos hoy en nuestras biblias.
Tertuliano en su obra Contra Marcion escrita a principios del siglo III nos hace saber que el evangelio de Mateo fue escrito por el Apóstol que conocemos y que lleva su nombre.
El propio Eusebio también cuenta en su historia Eclesiástica que un tal Pantaeno responsable de la escuela catequética de Alejandría contaba que en un viaje hecho a India había encontrado allí un evangelio de Mateo en hebreo y llevado allá por Bartolomé. Además, también nos habla que Mateo el Apóstol escribió sus memorias y que tanto la versión aramea como la versión griega fueron escritas por el mismo personaje.
Por último, Agustín de Hipona del siglo 4 y 5 está de acuerdo en que existía un Mateo hebreo pero que a su vez el Apóstol también escribió el Mateo griego que tenemos hoy día.
Concluimos que muy probablemente existió otro evangelio escrito por Mateo del cual no conocemos su contenido, pudo haber sido un proto-evangelio de Mateo o una colección de dichos de Jesús etc. Lo que según los estudiosos si podemos saber es que el evangelio de Mateo en griego (el que tenemos hoy), no parece ser una traducción del Mateo hebreo, ya que el Mateo griego no da buena evidencia de haber sido una traducción.
En ultimas se puede afirmar: dado que Mateo no fue un prominente apóstol y que en su vida pasada había sido un recaudador de impuestos (profesión odiada por el pueblo judío), no hay razón para creer que este mismo no fuera el autor del evangelio como lo atestiguan los padres apostólicos. Si se hubiera querido construir un caso fraudulento, si se hubiera querido dar credibilidad al evangelio como testimonio del cristianismo seguramente su hubiera usado otro nombre.
MARCOS
En cuanto al evangelio de Marcos tenemos de nuevo que Eusebio de Cesarea citando a Papias (Aprox. 125 d.C.), quien a su vez cita de nuevo a Juan el Anciano, tal vez el mismo Juan apóstol (esto haría que la afirmación de Marcos como el autor se remontara a la primera generación de Cristianos), escribe: "siendo intérprete de Pedro, escribió correctamente, aunque no en orden, todo cuanto recordaba de lo que fue dicho o hecho por Cristo; porque él no fue un oidor ni un seguidor del Señor, sino después, como he dicho, lo fue de Pedro, quien arreglaba los discursos para ser usados, pero no según el orden en que fueron pronunciados por el Señor".
También Ireneo en Contra Herejías, escribió: "Mateo publicó un Evangelio, mientras que Pedro y Pablo predicaban y fundaban la iglesia en Roma; y después de la partida (o fallecimiento) de ellos, Marcos, discípulo e intérprete de Pedro, también nos dio por escrito las cosas que eran predicadas por Pedro".
También Clemente de Alejandría citado por Eusebio en Historia Eclesiástica: "Habiendo Pedro predicado la Palabra en Roma, y hablado del Evangelio por el Espíritu Santo, muchos de los que estaban presentes exhortaron a Marcos, quien había sido por mucho tiempo seguidor de él, y que se acordaba de lo que había dicho, a que escribiera lo que había sido pronunciado; y habiendo preparado su Evangelio, lo entregó a los que se lo habían pedido; lo cual, cuando Pedro llegó a saberlo, ni se lo prohibió decididamente ni lo estimuló a hacerlo."
A más el propio Eusebio dice: “Que los oyentes de Pedro fueron tan conmovidos por su predicación, que no dieron descanso a Marcos, como seguidor de Pedro, hasta que consintió en escribir su Evangelio como memorial de las enseñanzas de Pedro; y "que el apóstol, cuando supo por revelación lo que había sido hecho, se agradó del celo de aquellos hombres y sancionó la lectura del escrito (es decir, del Evangelio de Marcos) en las iglesias" (Historia Eclesiástica). En otra de sus obras dice que "Pedro, por exceso de humildad, no se creía preparado para escribir el Evangelio; pero Marcos a quien conocía tan bien y quien fue su discípulo, se dice que escribió sus relatos de las enseñanzas de Jesús. Pedro da testimonio a estas cosas él mismo; porque todas las cosas relatadas por Marcos son, según se dice, memorias de los discursos de Pedro".
Algunos afirman que este Marcos es otro Marcos diferente y que esto es plausible, ya que, este era un nombre común en aquel entonces. A esto se puede argumentar también que Jerónimo en el siglo IV fue uno de los primeros en asociar al Marcos del Evangelio con Juan Marcos. También puede esgrimir que según 1 Pedro 5:13 Pedro y Marcos tenían una relación muy cercana, y que la gran mayoría de eruditos creen que Marcos es el mismo Juan Marcos del N.T..
Si pensamos en la cuestión este no es un hecho relevante para lo que estamos tratando de probar pues lo que verdaderamente importa es que quien escribió, sea Juan Marcos o cualquier otro Marcos es que según la tradición este conocía al apostol Pedro y solo reproducía la predicación del mismo, esto era lo que en realidad le daba autoridad a su escrito.
Por último, dado que la atribución a Marcos como autor del evangelio se encuentra en una época en donde la iglesia tendía a atribuir la redacción de los evangelios a los apóstoles o discípulos directos de Jesús es poco posible que se haya designado a Juan Marcos como autor sin haber tenido fuertes bases históricas para ello.
LUCAS
En cuanto al evangelio de Lucas tenemos la misma evidencia basada en Ireneo quien dice: “Lucas, compañero de Pablo, lo que éste predicaba, él lo escribió en un libro”. También Tertuliano, nos enseña que Lucas refleja fundamentalmente la predicación de Pablo. Sigue esta misma tónica Clemente de Alejandria y Orígenes, insistiendo en que es reflejo de la predicación de Pablo. Eusebio de Cesárea y San Jerónimo son otros testigos.
Dado que Lucas no era ni apóstol, ni testigo presencial de la vida terrestre de Cristo, era muy dudoso que se le hubiere atribuido sino en realidad el no fuera su autor.
JUAN
Por último, para el evangelio de Juan podemos citar como evidencia a Ireneo quien como ya fue dicho fue discípulo de Policarpo quien a su vez fue discípulo del apóstol Juan este escribe: “Juan, el discípulo del Señor, el que también descansó en el pecho del Señor, dio su evangelio cuando moraba en Éfeso, en Asia”; lo testifican igualmente; el Prologus antiquior (160-170) quien se lo atribuye a Juan; la misma autoría le atribuyen el Canon de Muratori poco después del 155, también, Teófilo Antioqueno; Polícrates, obispo de Efeso entre el 189-199; Teodoreto de Ciro (193-257); Tertuliano (140-214); Orígenes (185-254); el Prólogo monarquiano (s.II); Jerónimo (340-420), dice que Juan el Apóstol es “evangelista,” que Juan escribió contra las herejías de Cerinto, los ebionitas y otros.
Es preciso notar que aunque Juan el apóstol es el autor del evangelio, como lo atestigua la tradición vista arriba y que el superviso la escritura del mismo, se nota por lo menos en dos sesiones redacciones posteriores. La primera, el capitulo 15 -17, nos damos cuenta que en Juan 14: 31 pareciera como si después de lo dicho fueran a salir, pero los capítulos 15 al 17 las cosas suceden sin que se levanten, ni salgan de la sala; 14:31 parece empalmar con 18:1, haciendo probablemente de 15 – 17 un añadadido posterior. La segunda, en el capitulo 20 probablemente terminaria el evangelio pero luego fue insertado el capitulo 21, la mano de un redactor final aparte de Juan seria fuertemente evidenciada por 21:24, donde es claro la diferenciación entre el autor y quien escribe.
Esta evidencia es contundente. Se reitera, nadie tendría un motivo plausible para mentir sobre tal autoría. Considerando que Marcos y Lucas no fueron apóstoles y que Mateo aunque fue un apóstol fue un recaudador de impuestos seguramente odiado por muchos judíos de la época. En contraste se da el caso de los apócrifos, quienes los escribieron quisieron darle credibilidad usando los nombres de personajes prominentes como autores: Felipe, Jacobo, Pedro, María etc.
Como dice el estudioso Jean Carmignac, acerca de Mateo pero que perfectamente se puede aplicar a la autoria de los 4 evangelios sobre todo la ultima parte de su cita: “Una veintena de otros testimonios patrísticos más tardíos, incluyendo los de San Epifanio y San Jerónimo, quienes conocían el hebreo y el arameo, afirman asimismo que Mateo escribió su Evangelio en hebreo. No podemos en absoluto rechazar una tradición tan antigua (desde los oyentes de los Apóstoles), tan estable (ninguna voz discordante) y tan universal (desde la India hasta la Galia). Los exégetas, demasiado numerosos, lamentablemente, que rehúsan tenerla en cuenta no hacen una obra científica.”
Los testimonios sobre la autoria de los evangelios son también: ANTIGUOS, no recientes; ESTABLE, no discordante, nadie en aquel tiempo discutía sobre este hecho, este silencio es muy diciente, Por ultimo, UNIVERSAL quienes hablaban no hablaron desde un solo punto geográfico sino de diversas latitudes. Como dice nuestro autor, no tener en cuenta esto es no hacer un real seguimiento científico.
Entender esto es importante, muy importante, se puede creer que en realidad quien escribió los evangelios no es relevante que lo importante es lo que escribieron pero esto no es verdad, ya que si quienes escribieron no fueron testigos directos o indirectos de los hechos el documento pierde credibilidad. sin embargo, según el testimonio de los padres apostólicos podemos tener certeza de quien escribió nuestros evangelios.
LA DATACIÓN
MATEO
Como ya vimos según la tradición el evangelio de Mateo fue el primero que se escribió. Su fecha exacta es incierta, se sitúa entre el 50 y el 70 d.C. En todo caso seria antes de la ultima fecha dado que la destrucción del Templo de Jerusalen fechada para el 70 d.C. se menciona como futura (Mateo 24: 1 – 2) y a su vez no se menciona para nada en el libro como un evento sucedido, es muy difícil que un evento tan traumatico para la mentalidad judía pasase inadvertida y mas aun cuando existía una profecía de Jesús sobre el hecho que hubiese podido afirmar mas su mensaje.
Algunos dirán que Mateo si nombra tal destrucción y que por tanto el evangelio es posterior al 70 d.C., dirán que lo hace en textos como Mateo 21:41; 22:7; Mateo 23: 37 – 38 y que siguiendo la usanza de la época lo hace vedadamente. Meditando el asunto, si el evangelio fue escrito después del 70 y de la destrucción del templo cabe la pregunta: ¿Por qué Mateo no lo menciona abiertamente y si en supuesta clave como afirman los contradictores? ¿Por qué si lo menciona abiertamente en el cap. 24 no lo haría también como un evento sucedido luego en el mismo evangelio y mas aun cuando este hecho probaría la veracidad de la profecía de Jesús?
Si tomamos como verdadera la cita de Ireneo ya trascrita aquí donde el afirma que el evangelio se escribió mientras Pedro y Pablo evangelizaban en Roma, esto nos daría como fecha de composición aproximadamente el año 60, esto seria una buena fecha para el evangelio. Aun mas cuando en las ultimas décadas se conoció un estudio hecho por el eminente papirólogo y paleografo Peter Thiede en 1995 a cerca del papiro 64, P64 o papiro del magdalen college de Oxford que contiene 3 fragmentos del evangelio de Mateo, el experto fecho el papiro en un periodo entre el 35 d.C. y el 68 d.C.. Ahora, dado que P64 es una copia del Mateo griego original quiere decir que este original debe ser anterior al 68, esta datación es revolucionaria por dos razones: la primera es que hasta el momento del estudio el papiro se fechaba para aproximadamente el 200 d.C.. La segunda, es que de ser ciertas sus afirmaciones se probaría que el evangelio de Mateo fue escrito por un testigo ocular o que bien puedo estar bajo el escrutinio de personas que habían sido testigos de los hechos narrados y por tanto debería estar muy apegado a lo que realmente sucedió.
Thiede llego a esta conclusión utilizando entre otras una técnica de comparación, donde cotejo P64 con con otros documentos de la fecha ya dicha y estableció que el estilo y tipo de la escritura era muy similar, hecho que los hacia muy probablemente contemporáneos (cada generación cambia su modo y tipo de escritura y los paleógrafos usan esto para datar documentos antiguos sin fecha).
En conclusión, si que se pueda aportar una fecha exacta los estudiosos barajan posibilidades desde el 40 d.C. hasta comienzos de los 60 como fecha de la composición del evangelio.
En conclusión, si que se pueda aportar una fecha exacta los estudiosos barajan posibilidades desde el 40 d.C. hasta comienzos de los 60 como fecha de la composición del evangelio.
Para ampliar esta información usted puede remitirse al documental “testigos de la resurrección”: https://www.youtube.com/watch?v=HhFrAjWTuaA
MARCOS
Según los expertos Marcos fue el primero de los evangelios escritos y esta apreciación entra en disonancia con la aseveración de la tradición la cual nos asegura que fue Mateo el primero escrito y Marcos el segundo solo un poco después nombres como: Ireneo, Origenes, Epitafio y Jeronimo se suman a esta lista de testigos antiguos.
Ahora, Si según Ireneo Marcos escribió después de la partida o fallecimiento de Pedro y Pablo esto nos daría una fecha aproximada entre el 64 y 68 d.C., aunque muchos escritores creen que fue mucho antes, aproximadamente entre el 55 y el 62.
En todo caso es muy probable que no fuese escrito después del 70 d.C. por la misma razón que seguramente no fue escrito el evangelio de Mateo en esta misma época, no menciona la destrucción de Jerusalen, hecho que seguramente no hubiera sido obviado por un escritor mas cuando ya lo ha nombrado y cumpliría en ese caso una de las profecías de Jesús dada en Marcos 13. Por otra parte, dado que muy probablemente el ultimo fragmento del evangelio fue encontrado en Qumran y los habitantes de este asentamiento huyeron de allí escapando de las ordas Romanas en el año 68 d.C. el evangelio no pudo ser escrito posterior a esta fecha. También, dado que no menciona tampoco el comienzo de la guerra de Roma contra Israel la cual comenzó en el año 66 d.C., es muy probable que hubiese sido escrito antes de esta fecha, ya que este seria un evento digno de mencionar dada su magnitud y alcance.
Como ya hemos dicho hasta hace poco se citaba como fecha probable de composición mas probable algun momento entre el 55 y el 62, hasta que en el año de 1955 fue encontrado un fragmento del evangelio en las famosas cuevas del Qumran denominado para su estudio 7Q5, nombre dado por haber sido encontrado en la cueva 7 de Qumran y clasificado como el documento numero 5. El texto encontrado fue Marcos 6: 52 – 53, al papiro se le hicieron los respectivos estudios por parte de los papirologos y paleografos Peter Thide y José O'Callaghan. Por ejemplo, análisis computarizados, microscopios electrónicos, fotografía infrarroja, análisis paleográficos entre otros donde se pudo observar que estaba escrito solo por una cara lo cual corresponde al estilo de los rollos típicos del judaísmo y de los primeros momentos de la iglesia cristiana, ademas, se estudio la forma de las letras concluyendo que el papiro había sido escrito alrededor del año 50 d.C., ya que este fragmento hace parte de lo que fuese tan solo una copia del evangelio se estima que el original se escribió alrededor del año 46 d.C.
Después de un estudio matemático que también fue hecho al fragmento para analizar la posibilidad que no fuera en realidad un texto de Marcos sino de cualquier otro documento antiguo se se concluyo que: “De tal manera que, incluso en el caso de mayor exigencia científica, la probabilidad de que el 7Q5 sea cualquier otro texto hipotéticamente posible en griego y no sea el texto de Marcos es de una contra 10 mil millones. Estadísticamente, una cifra así es considerada como definitivamente segura". La cifra del profesor Dou (quien realizo el estudio), por tanto, indica que la hipótesis de que el 7Q5 no sea Marcos 6, 52-53 sería técnicamente imposible.
"Esto, científicamente hablando, ya no es una hipótesis, es una tesis". Con estas palabras acompañó Dou la entrega a O´Callaghan de las 30 páginas conteniendo los estudios matemáticos”. (http://es.wikipedia.org/wiki/Papiro_7Q5).
En conclusión nos encontramos ante un papiro que muy probablemente ubica la datación de Marcos en el año 46 d.C. aproximadamente, lo que nos da únicamente unos 15 años entre los sucesos y su escritura.
Para ampliar la información sobre 7Q5, Remitámonos a la siguiente cibergrafia: http://www.statveritas.com.ar/Varios/7q5-01.htm y https://www.aciprensa.com/reportajes/7q5.htm.
Una pregunta queda en el tintero: ¿Cuál fue el primer evangelio escrito: Mateo o Marcos? Tenemos que según la tradición fue Mateo, tenemos también que según los estudiosos seria Marcos. Esta es una cuestión bastante interesante, discutible y difícil. Por un lado no podemos desconocer la tradición, por el otro no podemos desestimar los estudios científicos de tajo y dogmáticamente, aunque que se pudiera afirmar que los testigos de primera mano llevan la ventaja.
Podemos intentar una respuesta diciendo que: Dado que la información patristica no es igual de universal a la información sobre la autoria esta tal vez estuviese equivocada y que en verdad Marcos fue primero o también podríamos decir que Mateo si fue primero y que por ende es mucho mas temprano que la fecha que dimos. En realidad no podemos saberlo con certeza.
Sin embargo y a fin de cuentas, si Mateo fue escrito primero que Marcos o viceversa es irrelevante para lo que tratamos de probar en este aparte y es que los documentos que tenemos como biográficos y testimoniales sobre Jesús de Nazareth son recientes a los hechos lo que los hace muy creíbles, esto sin importar cual fue primero, hecho que pertenecería a otra discusión.
LUCAS
La tradición nos dice que Lucas fue el tercer evangelio escrito. Esto lo evidencian el fragmento muratoriano, Jerónimo, Ireneo y Orígenes.
Tres acontecimientos nos pueden dar idea de la fecha de composición del evangelio. El uno seria la caída de Jerusalén que al no ser mencionada nos da una fecha límite para la escritura del evangelio del año 70 d.C., como ya hemos dicho antes dado que Jesús había profetizado el evento, si este ya hubiera sucedido seguramente se hubiera mencionado como prueba de la veracidad profética de Jesús, también se hubieran mencionado las consecuencias que este evento trajo para los cristianos vivos hasta ese entonces. El segundo acontecimiento seria el incendio de Roma y, con este la terrible persecución que Nerón emprendió contra los cristianos, este evento sucedió en el 64 d.C., dado que Lucas siendo historiador no menciona esto en Hechos de los apóstoles nos da otra pista, ya que, no mencionar el acontecimiento sería para un historiador como contar la historia de Japón sin mencionar la bomba atómica o la segunda guerra mundial eventos muy significativos en su historia para ser obviados, Hechos no podría haber sido escrito después de esa época. El tercer acontecimiento seria el fin del libro de los hechos que termina abruptamente con Pablo en Roma preso, la razón de esto sería que al terminar de escribir Hechos Pablo seguía preso en Roma, esto sería alrededor del año 63 – 64 d.C. Dado que el evangelio de Lucas fue escrito antes que Hechos, pues en Hechos 1:1 se le menciona como “el primer tratado”, entonces este sería escrito más o menos entre finales del 62 y comienzos del 63, esta sería una fecha limite, bien podría ser más antiguo.
JUAN
Según la tradición dela iglesia este fue el cuarto evangelio escrito, entre quienes afirman esto están Ireneo, Clemente de Alejandría y Jerónimo.
La fechación de esta carta ha tenido muchas propuestas que van desde el año 160 – 170 hasta poco tiempo después de la resurrección de Jesús.
Las dataciones de finales del siglo II quedaron sin piso luego del descubrimiento del papiro Rylands o P52, hallado en 1920 en Egipto y estudiado en 1934, este papiro contiene un fragmento del evangelio de Juan específicamente 18: 31-33 por un lado y por el otro los versículos 31 – 33. Dicho Papiro ha sido datado para aproximadamente el año 125 d.C. lo cual daría pie para pensar que el evangelio de Juan es anterior a esta época.
De allí para abajo la controversia es fuerte pero la mayoría de eruditos se acogen a una fecha en algún momento entre 85 – 100 d.C. esto por las siguientes razones:
1. El uso de la Palabra “había” en textos como 11:18; 18:1; 19:41 refiriéndose a lugares. El uso de tal palabra nos llevaría a pensar que los sitios mencionados ya no existían y si no existían era porque probablemente habían sido destruidos en la caída de Jerusalén que no es mencionada por que el evento ha ocurrió mucho tempo después y no domina el pensamiento de Juan
Aun así existe un único texto en Juan que habla como si el lugar que se describe aún existe, este teto se halla en 5:2 y usa las palabras “hay” y “tiene”.
2. Según la tradición el evangelio fue escrito después del apocalipsis el cual se fecha para el año 95 d.C.
3. El testimonio de la tradición entre otros Policarpo (discípulo directo de Juan), es unánime en mostrar que Juan paso de Palestina a Éfeso, fue perseguido y condenado por el emperador Domiciano y desterrado a la isla de Patmos, una vez muerto el emperador volvió a Éfeso en el 96 d.C. desde donde escribí las tres cartas y el evangelio a principios del reinado de Trajano (98 – 117).
Algunos han propuesto que la tradición oral sobre el evangelio de Juan comenzó en la comunidad Juanina antes del 70 D.C. y que la redacción final del libro se llevo a cabo en la fecha ya dicha.
La datación tardía de esta carta es equilibrada con el hecho que quien escribe es un testigo presencial de lo que cuenta.
Entonces tenemos documentos escritos por testigos presenciales de los hechos como Mateo y Juan, o bien, por testigos indirectos quienes recibían información de primera mano como Marcos de Pedro y Lucas de Pablo. Ademas, tenemos documentos que distan como mínimo 15 años y como máximo aproximadamente 60 años después de ocurridos los hechos.
Este hecho es importante pues hace a los evangelios increíblemente cercanos a los hechos, comparados con otras biografías aceptadas hoy día como ciertas que distan de los hechos reales por siglos. por ejemplo, Las primeras dos biografías de Alejando Magno las escribieron Arriano y Plutarco, más de cuatrocientos años después de la muerte de Alejandro en el afio 323 a.C, aun asi son aceptadas como veridicas.
Por ultimo, no se puede olvidar que quienes escribían contaron con la inspiración del Espíritu santo quien los guió.
Por todas estas cosas el creyente puede estar muy seguro y muy cierto que los documentos que nos cuentan sobre Jesús, sus palabras, su vida y obra son confiables.
LUCAS
La tradición nos dice que Lucas fue el tercer evangelio escrito. Esto lo evidencian el fragmento muratoriano, Jerónimo, Ireneo y Orígenes.
Tres acontecimientos nos pueden dar idea de la fecha de composición del evangelio. El uno seria la caída de Jerusalén que al no ser mencionada nos da una fecha límite para la escritura del evangelio del año 70 d.C., como ya hemos dicho antes dado que Jesús había profetizado el evento, si este ya hubiera sucedido seguramente se hubiera mencionado como prueba de la veracidad profética de Jesús, también se hubieran mencionado las consecuencias que este evento trajo para los cristianos vivos hasta ese entonces. El segundo acontecimiento seria el incendio de Roma y, con este la terrible persecución que Nerón emprendió contra los cristianos, este evento sucedió en el 64 d.C., dado que Lucas siendo historiador no menciona esto en Hechos de los apóstoles nos da otra pista, ya que, no mencionar el acontecimiento sería para un historiador como contar la historia de Japón sin mencionar la bomba atómica o la segunda guerra mundial eventos muy significativos en su historia para ser obviados, Hechos no podría haber sido escrito después de esa época. El tercer acontecimiento seria el fin del libro de los hechos que termina abruptamente con Pablo en Roma preso, la razón de esto sería que al terminar de escribir Hechos Pablo seguía preso en Roma, esto sería alrededor del año 63 – 64 d.C. Dado que el evangelio de Lucas fue escrito antes que Hechos, pues en Hechos 1:1 se le menciona como “el primer tratado”, entonces este sería escrito más o menos entre finales del 62 y comienzos del 63, esta sería una fecha limite, bien podría ser más antiguo.
JUAN
Según la tradición dela iglesia este fue el cuarto evangelio escrito, entre quienes afirman esto están Ireneo, Clemente de Alejandría y Jerónimo.
La fechación de esta carta ha tenido muchas propuestas que van desde el año 160 – 170 hasta poco tiempo después de la resurrección de Jesús.
Las dataciones de finales del siglo II quedaron sin piso luego del descubrimiento del papiro Rylands o P52, hallado en 1920 en Egipto y estudiado en 1934, este papiro contiene un fragmento del evangelio de Juan específicamente 18: 31-33 por un lado y por el otro los versículos 31 – 33. Dicho Papiro ha sido datado para aproximadamente el año 125 d.C. lo cual daría pie para pensar que el evangelio de Juan es anterior a esta época.
De allí para abajo la controversia es fuerte pero la mayoría de eruditos se acogen a una fecha en algún momento entre 85 – 100 d.C. esto por las siguientes razones:
1. El uso de la Palabra “había” en textos como 11:18; 18:1; 19:41 refiriéndose a lugares. El uso de tal palabra nos llevaría a pensar que los sitios mencionados ya no existían y si no existían era porque probablemente habían sido destruidos en la caída de Jerusalén que no es mencionada por que el evento ha ocurrió mucho tempo después y no domina el pensamiento de Juan
Aun así existe un único texto en Juan que habla como si el lugar que se describe aún existe, este teto se halla en 5:2 y usa las palabras “hay” y “tiene”.
2. Según la tradición el evangelio fue escrito después del apocalipsis el cual se fecha para el año 95 d.C.
3. El testimonio de la tradición entre otros Policarpo (discípulo directo de Juan), es unánime en mostrar que Juan paso de Palestina a Éfeso, fue perseguido y condenado por el emperador Domiciano y desterrado a la isla de Patmos, una vez muerto el emperador volvió a Éfeso en el 96 d.C. desde donde escribí las tres cartas y el evangelio a principios del reinado de Trajano (98 – 117).
Algunos han propuesto que la tradición oral sobre el evangelio de Juan comenzó en la comunidad Juanina antes del 70 D.C. y que la redacción final del libro se llevo a cabo en la fecha ya dicha.
La datación tardía de esta carta es equilibrada con el hecho que quien escribe es un testigo presencial de lo que cuenta.
Entonces tenemos documentos escritos por testigos presenciales de los hechos como Mateo y Juan, o bien, por testigos indirectos quienes recibían información de primera mano como Marcos de Pedro y Lucas de Pablo. Ademas, tenemos documentos que distan como mínimo 15 años y como máximo aproximadamente 60 años después de ocurridos los hechos.
Este hecho es importante pues hace a los evangelios increíblemente cercanos a los hechos, comparados con otras biografías aceptadas hoy día como ciertas que distan de los hechos reales por siglos. por ejemplo, Las primeras dos biografías de Alejando Magno las escribieron Arriano y Plutarco, más de cuatrocientos años después de la muerte de Alejandro en el afio 323 a.C, aun asi son aceptadas como veridicas.
Por ultimo, no se puede olvidar que quienes escribían contaron con la inspiración del Espíritu santo quien los guió.
Por todas estas cosas el creyente puede estar muy seguro y muy cierto que los documentos que nos cuentan sobre Jesús, sus palabras, su vida y obra son confiables.
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