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BOSQUEJO
Tema: El temor a la muerte. Titulo: Estudio bíblico, la jerusalén celestial (parte dos). Texto: Apocalipsis 21: 22 - 27. Autor: Pastor Edwin Guillermo Núñez Ruiz.
(2 MINUTOS DE LECTURA)
Introducción:
A. Repaso: Lo que pasa en la nueva Jerusalén (ver. 4 - 6), los que van a la nueva Jerusalén (ver 5 - 8), como es la nueva Jerusalén (ver. 9 - 21).
B. Hoy reflexionaremos sobre lo que es la esencia de la nueva Jerusalén. Dicha esencia se puede resumir en la frase: la gloria de dios, que no es la nube aquella del tabernaculo sino Dios mismo.
I. NO NECESITA TEMPLO (ver. 22).
A. El templo era la presencia de Dios en medio del pueblo de Israel en el A.T., como ahora Dios mismo esta en en lugar entonces dicho templo no es necesario.
B. Es de anotar que de nuevo se nombra al cordero en la misma posición del Dios todopoderoso infiriendo así la doctrina de la trinidad.
II. NO NECESITA LUZ (ver. 23).
A. El lugar no necesita de la luz del sol o de la luna; no porque estos no existan en el nuevo universo sino mas bien porque la presencia radiante de Dios la ilumina por completo, recordemos 21:11, donde se nos habla de tal resplandor.
B. D de nuevo en este versículo se iguala al cordero con Dios padre infiriendo la trinidad.
III. NO HAY NOCHE (ver. 25).
A. Este hecho es consecuencia directa de lo anterior, la ciudad es iluminada por la gloria constante de Dios por lo tanto no hay noche.
IV. SE LLEVA ADORACION (ver 24, 26).
A. Como es claro, la nueva Jerusalén será el centro de la nueva creación de Dios, donde según vemos habrá otras naciones.
B. Dichas naciones y sus reyes peregrinaran allí para llevar adoración y honor a Dios, aunque la presencia de Dios llenara toda la creación la nueva Jerusalén será un lugar importante donde el se manifiesta.
V. SERA LIMPIA (ver 27).
A. Allí no entraran:
1. Los inmundos
2. Los abominables: Idolatras.
3. Los mentirosos.
B. Solo entraran quienes estén escritos en el libro de la vida del cordero (ver. 13:8; 17:8).
Conclusiones:
A. El cielo debe dejar de ser solo un poema para convertirse en una doctrina que afecte nuestra vida y nuestra muerte.
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