Por: Pastor Edwin Guillermo Nuñez Ruiz
Son llamadas de este modo 7 cartas del N.T.: la de Santiago, las dos de Pedro,
las tres de Juan y la de Judas. Algunos incluyen aquí a la carta a los hebreos.
El nombre se debe a que no están dirigidas a iglesias o personas en particular,
sino más bien a grupos cristianos en general. Es importante aclarar que aunque
segunda y tercera de juan tiene destinatario propio, parece ser que fueron
ubicadas aquí por extensión.
EPÍSTOLA DE SANTIAGO - INTRODUCCIÓN
AUTOR: Santiago (1:1). Algunos afirman
que este Santiago es el mencionado en la Escritura como el hermano de Jesús (Mat
13:55; Mar 6:3). Esto no es del todo seguro. La asociación del hermano de Jesús
y la autoría de esta carta se da solo hasta Orígenes, hasta la primera mitad
del siglo III, Siendo que la carta ya
era conocido mucho antes de esta fecha.
FECHA: Aprox. 44 – 49 d.C. las razones para esto son varias: La
carta parece desconocer las controversias judaizantes que comenzaron alrededor
del año 50. De ser así esta sería la primera carta escrita del N.T.
DESTINATARIOS: (1:1)
“A las doce tribus que están en la
dispersión”. Esta
expresión indica que la carta es escrita para judíos cristianos. Cristianos por
que se nos dice que han “nacido por la palabra de verdad” (1:18), contiene
alrededor de 27 alusiones al sermón del monte. Judíos, por las múltiples
alusiones al antiguo testamento, más de 40 y a términos judíos como Hermanos,
sinagoga, ancianos, Sabaot (5:4) etc. Además, sabemos de ellos que han sido
esparcidos muy probablemente por la persecución.
TEMA: El tono de la carta es más de
tipo práctico que doctrinal. En ella se dan una serie de instrucciones y
exhortaciones morales cuya práctica vendría a ser la muestra de una verdadera
fe, escritas en un griego muy correcto y elegante.
PROPÓSITO: Exhortar a los lectores a
respaldar la fe que decían tener con obras.
SINOPSIS DE LA CARTA
Saludo (1:1)
Se caracteriza por ser un saludo muy corto.
Se nos informa sobre el autor, su autoridad (esclavo de Jesucristo), los
destinatarios y la formula: Salud o regocijaos.
1.
LAS PRUEBAS (1: 2 – 12).
En lugar de entristecerse por
las dificultades que toca sufrir el creyente debe estar feliz sabiendo que
estas generan en él un perfeccionamiento moral (2 – 4).
El creyente debe pedir
sabiduría, aquella sabiduría practica que le permite llevar a la vida cotidiana
lo que ha aprendido sobre Dios en la Escritura, una sabiduría que le ayude a
soportar las pruebas. Dicha petición debe ser hecha con certeza sabiendo que La
promesa de Dios es dársela en abundancia (5 – 8).
Unas de las pruebas que pasaban
los hermanos eran la pobreza y el maltrato de los ricos. Santiago anima a los pobres a sentirse felices de lo mucho
que valen para Dios y a los ricos les dice que se sientan felices cuando Dios
los humille y que sus riquezas no duraran para siempre (9 – 11).
Soportar la prueba con entereza
y fidelidad a Dios trae una muy buena recompensa (12).
2.
LA TENTACIÓN (1: 13 – 18).
Dios es incompatible con el mal
y el pecado, de Él no proviene ningún tipo de mal solo bienes. Por ejemplo, la regeneración
misma generada en nosotros por la Palabra de Dios; por eso el no puede tentar a
nadie. Por el contrario, es el pecador el responsable de caer o no caer en la tentación.
3.
LA PALABRA DE DIOS (1: 19 – 27).
Los deberes que tenemos frente a
la palabra de Dios son: escucharla y recibirla mansamente (19 – 21),
practicarla (22 – 25). Por ultimo, el autor hace una aplicación practica diciéndonos
que la religión no puede ser únicamente una demostración de rituales
exteriores, sino mas bien una practica de ella en la vida cotidiana con: el
buen uso de la lengua, la practica de la misericordia y la santidad.
4. EL POBRE Y EL RICO (2: 1 – 13)
Tenemos aquí otra aplicación sobre el hecho que el creyente de
practicar lo que aprende de la Palabra de Dios y tiene que ver con sus
relaciones interpersonales particularmente las interacciones entre los diversos
estratos sociales.
Tener parcialidad con los ricos en la iglesia es
algo contrario al evangelio (1 – 4). Los pobres son preferidos por Dios y esto
se ve en el hecho que la mayoría de cristianos eran pobres (5). Si Dios ha
exaltado al pobre no puede ser que este sea humillado por la iglesia y mucho
menos que los cristianos ricos los opriman, esto hace blasfemar el nombre de Jesús
(6 – 7).
Hacer acepción de personas es negar el amor cristiano,
es un pecado contra la misericordia y Dios lo juzgara (8 – 13)
5. LA FE Y LAS OBRAS (2: 14 – 26)
Nuestra fe no debe ser puramente teórica sino
practica (14 – 18), esta es la fe que salva. Una fe puramente intelectual no
salva a nadie por que si ese fuera el caso los demonios serian salvos, pues
ellos creen también (19). Un argumento más es levantado y son los ejemplos bíblicos
de Abraham y de Rahab quienes debieron manifestar su fe a través de actos que la confirmaban (20 –
26).
6. LA LENGUA (3: 1 – 12)
El comienzo de la exhortación parece ser dirigida a no ambicionar el
titulo de maestro, tal vez apetecido por su renombre en aquel momento, debe
tener cuidado quien tal desee sabiendo que a estos se les juzgara con mas
severidad y que quien enseña esta mas propenso a cometer pecados de la lengua
(1 – 2).
De todos los pecados posibles tal vez los mas difíciles de evitar son
los que se cometen con la Boca, esta puede ser muy destructiva, se instruye al
creyente a trabajar duro por dominar su lengua ya que es un miembro muy difícil
de domar, si lo hace ser un hombre maduro o perfecto ( 3 – 12).
7. LA SABIDURÍA (3: 13 – 18)
Hay una falsa sabiduría que se evidencia por la amargura, la rencilla
y la envidia. Quien dice ser sabio pero manifiesta estas actitudes se esta engañando
su supuesta sabiduría es carnal y diabólica (13 – 16). Por otra parte la sabiduría
divina es: pacifica, obediente, amable, compasiva, bondadosa, sin parcialidades,
bondadosa y sincera (17 – 18).
8. MOTIVOS DE DISCORDIA (4: 1 – 12).
En este aparte se pasa a enumerar las causas de discordia entre los
hermanos de la asamblea:
1. La envidia (1 – 3): Nuestra naturaleza pecadora
produce en nosotros el deseo de poseer lo que otros tienen, produce la misma
avaricia pecados que nos llevan a buscar bienes de cualquier manera que a su
vez nos llevan a la hostilidad con otros hermanos. La verdadera razón por la que
no tenemos lo que deseamos es que no oráramos y si lo hacemos lo hacemos con
las intenciones equivocadas, para satisfacer nuestra propia carne.
2. El amor al mundo (4 – 6): Se condena en este texto a
aquellos que siguiendo sus pasiones desordenadas abandonan a Dios cometiendo de
esta manera “adulterio espiritual”. Dios quiere todo de nosotros, no quiere
amores compartidos.
(7 – 10) es una exhortación
al arrepentimiento de este “adulterio espiritual” se insta a aquellos que han caído
en esto a re-consagrarse a Dios, a humillarse ante Dios y de esta manera el
diablo no tendrá poder alguno sobre ellos.
3. Maledicencia (11 – 12): Por ultimo, una advertencia
sobre la calumnia que seguramente cundía en la comunidad. Se instruye sobre el
hecho cierto que solo Dios es Juez y que al juzgar tomamos el lugar de Dios el
cual no nos corresponde.
9.
LOS
RICOS (4: 13 – 5:6)
A ellos se les amonesta a abandonar su orgullo, a no
hacer planes sin contar por un la do son la transitoriedad de la vida y por el
otro con la voluntad de Dios (4: 13 – 17).
Al comienzo del capitulo 5 se da una severa
reprimenda a los ricos que se manifiestan soberbios, injustos, avaros y
mundanos. Ellos pueden esperar castigos de Dios, dado esto, en lugar de estar
alegres deberían lamentarse. (5:1 – 6)
10.
CONSEJOS FINALES (5: 7 – 20)
El primero de estos concejos es tener paciencia
frente a la opresión de los ricos (7 -11). Luego se hace una advertencia sobre
el juramento hecho a la ligera y sin motivos graves (12). Después se da a los cristianos
una serie de concejos para varios casos, especialmente frente a la enfermedad
(13 – 18). Por ultimo, se recomienda trabajar por la conversión de los hermanos
apartados (19 – 20).
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